Se inician las cartas desde Paris

Buen nombre para describir y escribir en este blog. Como ustedes saben me vendi al sistema y entre al salvaje mundo de los celulares por un hombrecito que quiso repetir la conquista europea en pleno siglo XXI, le resulto. Y ahora me arriendo al mundo de los diarios cibernéticos sòlo (acostùmbrense a las tildes al revès) para que desde allà puedan escucharme y vayamos juntos haciendo este viaje.

Para que les digo lo largo aue se hizo el viaje en aviòn; que por supuesto NO era primera clase y por lo tanto los asientos eran un poquito incòmodos, cuestiòn que nis caderas me recordaron por varios dìas màs. Aunque peor suerte tuvo mi companero (no existe la n de nandu!) de asiento, un chico PUC que se venìa por 3 meses y medio de vacaciones a Europa, kiubo. No es por pelar pero adivinen de donde sacò la plata...papito corazòn. Pero ademàs estaba Oscar, otro chileno que habìa dejado mujer e hijos para venir a probar suerte a las Islas Canarias (exòtico); con èl nos acompanamos hasta antes de salir a Madrid; asì las 5 horas de espera en el aeropuerto no fueron tan dramàticamente aburridas.

En el aeropuerto de Madrid se produjo la primera discriminaciòn positiva, y mientras mis companeros de vuelo tuvieron que hacer un laaaaaarga fila para "no comuneros" en Policia Internacional, yo pasè rapidito por la fila de los ilustres miembros de la Comunidad Europea.

Y llegamos a Paris, no cachando una! no entendìa porquè aùn no me pedìan mi pasaporte en el aeropuerto de Orly; Sophie (nuevo personaje de la historia: pareja de mi tìo) me dijo despuès que asì era esto de la Comunidad Europea. Para que les digo el trauma del idioma, porque aquì nadie te habla despacito y modulado como la profesora de francès, ni te miran con paciencia y disposiciòn cuando se dan cuenta de que no hablas bien el francès: Pero ya pasè pruebas difìciles como: ir al supermercado, subirte al bus (que no se llama micro), mandar cosas por correo; comprar entradas para algo y comprar un chip para mi celular (mi màxima hazana). Por supuesto que he tomado trenes equivocados como hoy que lleguè a la ùltima estaciòn del tren pero justamente para el otro lado de donde debìa ir.

Son tantas las cosas que se pueden contar de Paris, son tantos los lugares, paisajes y tipos de personas que es bastante difìcil resumirlo en un blog. Pero poco a poco se pueden ir mostrando escenas; lo primero es contarles los personajes de la historia, ya les hablè del chico PUC, de Oscar y de Sophie, que por cierto es actriz. Tambièn estàn mi prima Anna de 3 y mi tio George que llega manana desde Brazil.